En la historia de TI, la cantidad de veces que los departamentos de TI propusieron a la alta dirección invertir en una nueva tecnología, un nuevo programa de calidad de datos o una nueva técnica de diseño, pero no pudieron convencerlos, debe ser innumerable. Evidentemente, no hay solo una razón por la que TI no siempre tuvo éxito, sino la falta de un estrategia de datos es definitivamente uno dominante. Siempre ha sido un concepto indispensable, pero ahora que los datos se están convirtiendo cada vez más en un activo crítico para muchas líneas de negocio, una estrategia de datos es crucial.
Una estrategia de datos describe un plan único y unificado para toda la organización para el uso de datos corporativos como un activo vital para cada forma de toma de decisiones. Describe, por ejemplo, por qué una organización quiere almacenar datos, qué datos almacenar, cuáles son los planes con respecto al uso de datos, cuál es la visión con respecto a los datos y cuál es el plan para implementar la estrategia de datos. Una estrategia de datos debe estar alineada con los objetivos comerciales y otras estrategias comerciales.
Si no hay una estrategia de datos, muchas nuevas propuestas de TI no tienen contexto. Por ejemplo, si TI propone invertir en un nuevo servidor de base de datos SQL analítico, deben explicar por qué. Probablemente el motivo sea mejorar el rendimiento de los informes. Entonces, la pregunta para la alta dirección es ¿por qué se debe mejorar el desempeño? ¿Cómo encaja eso en el contexto más amplio de las cosas? O, ¿cómo pueden ver el valor de mejorar la calidad de los datos si no existe un plan general y cuando no les queda claro cuál es el impacto en el negocio? Es como si el departamento de TI propusiera a la gerencia invertir en una pieza de rompecabezas sin que exista un rompecabezas. La falta de un rompecabezas de este tipo dificulta que la alta dirección justifique la inversión.
La estrategia de datos es el rompecabezas. Proponer nuevas ideas, nuevas tecnologías y nuevos programas tiene más sentido cuando existe tal acertijo y cuando ha sido aceptado por la dirección. En este caso, cada propuesta incluye una descripción de cómo forma una nueva pieza del rompecabezas y cómo encaja en el rompecabezas general. Por ejemplo, si una estrategia de datos establece que en cuatro años la exactitud de los datos visibles para los proveedores de la empresa debe ser superior al 99,5%, tiene sentido que la alta dirección introduzca el concepto de administrador de datos en algunas partes de la organización. . Como se indicó, la estrategia de datos facilita la justificación de la inversión. Sin la estrategia de datos, no hay contexto empresarial.
Si una organización no tiene una estrategia de datos, se debe desarrollar una lo antes posible. Deje a un lado todas las nuevas propuestas de nuevos productos, nuevos proyectos, nuevas técnicas, etc., e invierta primero en una estrategia de datos y asegúrese de que sea aceptada por la alta dirección. Porque la estrategia de datos describe las reglas para almacenar, procesar y usar datos, y la visión de los datos. Es el rompecabezas, y vender nuevas ideas que se ajusten al rompecabezas será mucho más fácil.